"El plan inicial era reanudar la carrera en las clásicas de Ardèche y Drôme (1 y 2 de marzo). Pero todo se fue al traste. Si puedo reanudar los entrenamientos (en carretera) hacia el 4 o 5 de febrero, sólo tendré tres semanas en las piernas antes de esas dos carreras", analizó.
De ahí que su objetivo haya cambiado. "Hoy sólo tengo una cosa en mente: estar en la salida de la Flecha Brabanzona (18 de abril) y luego seguir con las otras tres clásicas de las Ardenas (la Amstel el 20, la Flecha Valona el 23 y Lieja el 27) con la ambición de ganar".
"Para el Giro (del 10 de mayo al 1 de junio), probablemente será demasiado corto, aunque nunca se sabe", dijo el bicampeón olímpico de París 2024, cuya principal mira sigue situándose en el Tour de Francia.
El ciclista belga sigue actualmente inmovilizado y espera el resultado de un escáner el 9 de enero para saber si entonces podrá reanudar los entrenamientos sobre un rodillo.
El campeón del mundo de 2022 sufrió un accidente mientras se entrenaba en solitario a principios de diciembre al noroeste de Bruselas. No pudo esquivar el coche de una oficina de correos belga, cuya cartero abrió repentinamente la puerta al pasar él.
Evenepoel fue recogido con fracturas en una costilla, el omóplato derecho y una mano, y sufre contusiones en los pulmones y una luxación de la clavícula derecha con desgarro de todos los ligamentos circundantes. "Estoy mejorando, pero lentamente. Cada día noto pequeños progresos. En cuanto al ejercicio, no puedo hacer nada, aparte de manipular un poco el hombro para que no esté demasiado rígido", se lamenta.