Law, fallecido este viernes a la edad de 84 años, se unió Bobby Charlton y George Best para inspirar el renacimiento del United de las cenizas del desastre de Múnich en la década de 1960.
La etapa de Law en el United fue una época dorada, y una estatua -con su dedo apuntando al aire en señal de celebración junto a Charlton y Best- se alza en el exterior de Old Trafford para conmemorar su emblemática estancia de 11 años.
Con 237 goles en 404 partidos en todas las competiciones, Law es el tercer máximo goleador de la historia del club.
Law, apodado "el rey" por los aficionados, fue el primero de los cuatro jugadores del United que ganaron el codiciado Balón de Oro -obtuvo el premio al mejor jugador de Europa en 1964- y en 2003 fue elegido "jugador más destacado de los últimos 50 años" en Escocia.
Sir Alex Ferguson, el entrenador más laureado del United, quedó maravillado por el instinto depredador de su compatriota.
"Para mí, Denis es sin duda el mejor jugador escocés. Era tan rápido como un rayo y tenía tantos reflejos que no había nada que no pudiera conseguir en el área", afirmó Ferguson.
"Llegaba un centro y él se levantaba de la nada y remataba de cabeza. Tenía una combinación de reacciones, sincronización y conciencia increíbles".
Law nació en Aberdeen en 1940, hijo de un pescador de arrastre y el menor de siete hermanos.
Perfeccionó sus habilidades con un ovillo de lana atado a la ropa de su madre y, a los 15 años, su precoz talento llamó la atención del Huddersfield Town.
"Vivíamos en un lugar llamado Printfield Terrace. El entrenador del Huddersfield era un tipo llamado Andy Beattie, que era de Aberdeen. Su hermano vivía en Printfield Walk, justo enfrente", cuenta Law.
"Debió de verme jugar en el colegio, habló con mis padres y les dijo que les gustaría que me fuera a un sitio llamado Huddersfield, que, por supuesto, estaba al otro lado del mundo. Y ahí empezó todo".
Law sólo tenía 16 años cuando Bill Shankly le hizo debutar con el Huddersfield en la Segunda División, y progresó tan rápidamente que dos años más tarde se ganó la primera de las 55 convocatorias con Escocia.
Llegó a marcar 30 goles con Escocia, y sigue siendo el máximo goleador de la historia del país, junto con Kenny Dalglish.
En 1960, Law, con sólo 20 años, fichó por el Manchester City por la cifra récord de 53.000 libras esterlinas.
Marcó 21 goles en 15 meses con el City, antes de fichar por el Torino por 110.000 libras, entonces récord británico.
Protagonismo
La mala racha de Law en Italia terminó al cabo de un año, y la gota que colmó el vaso fue un accidente de coche en el que su compañero de equipo Joe Baker, que los llevaba de vuelta de una noche de juerga, tuvo que ser operado para salvarle la vida.
Law fichó por el United por 115.000 libras, una cifra récord para el club por aquel entonces, y se encontró con un equipo que luchaba por encontrar una identidad tras el accidente aéreo de Múnich que se cobró la vida de varios jugadores en 1958.
El entrenador del United, Matt Busby, uno de los supervivientes de aquella tragedia, estaba decidido a construir otro gran equipo y Law asumiría un papel estelar.
Law sólo necesitó siete minutos para marcar en su debut, anotó un gol en la victoria del United sobre el Leicester en la final de la Copa de Inglaterra al final de su primera temporada y al año siguiente marcó 46 goles.
En tres años, Law, Best y Charlton lideraron una campaña en la que ganaron el título, y en 1968 el United era el rey de Europa.
La "santísima trinidad" del United desplegó uno de los mejores fútbol jamás visto en Inglaterra y estableció un compromiso con un estilo ofensivo que sigue formando parte del ADN del club.
Una lesión de cartílago obligó a Law a perderse la famosa goleada por 4-1 al Benfica en Wembley, un triunfo que convirtió al United en el primer campeón inglés de la Copa de Europa.
Sin embargo, Law siguió siendo parte integrante del equipo y Busby lo calificó como "el mejor jugador del Manchester United de todos los tiempos".
Cuando Busby dejó de ser entrenador del United, el nuevo ´míster´ Tommy Docherty, dejó marchar a Law, que había aceptado una oferta para regresar al City en 1973.
La decisión del United se volvió en su contra un año después, cuando el equipo de Docherty tuvo que vencer al City en Old Trafford para mantener vivas sus esperanzas de evitar el descenso.
Law marcó de tacón el único gol del partido y se negó a celebrarlo creyendo que había relegado al club que le había convertido en leyenda.
Los resultados de los demás equipos significaban que el United habría descendido fuera cual fuera el resultado, pero Law estaba destrozado.
"Estaba inconsolable. No quería que ocurriera. ¿Cuánto duró el sentimiento? ¿Cuánto hace del partido? Treinta y tantos años. Ahí tienes la respuesta", dijo Law en 2010.
Fue el último gol que Law marcó en un partido oficial, ya que se retiró tras disputar con Escocia su único Mundial unos meses después.