López culminó la gesta al imponerse en la final de la categoría de 130 kilos por 6-0 al chileno de origen cubano Yasmani Acosta (36), en el estadio Campo de Marte al que acudió el presidente del COI, Thomas Bach.
El guerrero cubano superó el anterior récord de cuatro oros de una misma prueba que ostentaba un selecto grupo de mitos del deporte como Michael Phelps, Carl Lewis, Katie Ledecky, Al Oerter, Paul Elvstrom y Kaori Icho.
Bajo una enorme ovación del público, López celebró la hazaña alzando en volandas a sus dos entrenadores antes de arrodillarse él mismo y proceder a dejar sus zapatos en la colchoneta, una tradición de los luchadores que se retiran.
Imbatido desde Pekín-2008, el gigante del pequeño pueblo de Herradura dio por concluida su legendaria carrera con esta rotunda victoria frente a Acosta, su amigo, discípulo y excompañero.
Acosta, cuya plata es la segunda medalla de Chile en estos Juegos, abandonó Cuba en 2015 precisamente por la falta de oportunidades que le dejaba el glorioso recorrido olímpico de Mijaín.