El partido entre Rumanía, líder del Grupo C2, y Kosovo, segundo clasificado, se suspendió el viernes en el tiempo añadido después de que los jugadores kosovares abandonaran el campo con 0-0 en el marcador al escuchar cánticos a favor de Serbia por parte de los aficionados locales, algo que Rumanía ha negado.
La Federación Rumana de Fútbol (FRF) fue multada con 128.000 euros tras múltiples acusaciones, entre ellas comportamiento discriminatorio y conducta impropia del equipo.
También se ha ordenado a la FRF que cierre su estadio para el próximo partido en casa debido al comportamiento racista y discriminatorio de los seguidores del equipo.
La Federación de Fútbol de Kosovo pagará una multa de 6.000 euros por la conducta impropia de su equipo.