Thomas Frank, el nuevo responsable de los Spurs, no pudo hacer ninguna promesa sobre el papel a largo plazo de Son en el club cuando se dirigió a los medios de comunicación el viernes.
El club se guarda sus cartas en cuanto a la probabilidad de una salida.
Sin embargo, las fuentes indican que el Tottenham no está dispuesto a comprometerse a mantenerlo más allá de su gira de pretemporada. Podría ser una gira de despedida.
A pesar de su estatus de icono en el norte de Londres y de su inmensa popularidad en Asia, el jugador no parece tener claro qué va a pasar a partir de ahora.
Son, de 33 años, tiene previsto ser una figura clave en la próxima gira del club, con partidos contra el Arsenal en Hong Kong el 31 de julio y contra el Newcastle en Seúl tres días después.
Su inclusión en el equipo es esencial desde el punto de vista comercial, sobre todo dada la importancia del viaje para la expansión de la marca Tottenham. Su imagen está muy ligada al material promocional y a la venta de entradas, por lo que su ausencia pondría en peligro al club ante los organizadores de la gira.
Sin embargo, entre bastidores se han mantenido conversaciones y se entiende que el club ha insinuado a Son que no se interpondría en su camino si llegara una oferta adecuada.
El jugador no está presionando para hacerlo, pero el Tottenham está abierto a negociar si las condiciones son las adecuadas, ya que está sopesando la oportunidad de hacer caja mientras pueda. A Son le quedan 12 meses de contrato, y esta será la última ventana en la que podrán obtener una gran cantidad por él.
El Tottenham no está presionando activamente para que Son se marche, pero reconoce que el club ya ha disfrutado de los mejores años de su carrera.
Con la vista puesta en el futuro, ya se ha movido con decisión en el mercado, cerrando un acuerdo permanente por Mathys Tel, del Bayern de Múnich, y fichando a Mohammed Kudus, del West Ham. El equipo también está buscando nuevas opciones ofensivas,como Yoane Wissa, del Brentford.
Son ha dejado de ser considerado fundamental en los planes del Tottenham. Aunque sigue formando parte de la plantilla y participará en el amistoso de este fin de semana contra el Reading, está disponible para ser traspasado y tiene varios pretendientes.
Tres clubes saudíes - Al-Ahli, Al-Nassr y Al-Qadsiah - se han mostrado dispuestos a pagar más de 30 millones de libras para llevarse a Son a Oriente Próximo. También ha surgido el interés de la Major League Soccer, con LAFC vinculado a principios de verano. Su antiguo entrenador, Jose Mourinho, estaría dispuesto a llevárselo al Fenerbahce.
Son viajará con el equipo a Asia, pero lo que ocurra después no está nada claro. Para un jugador que ha dado a los Spurs tantos momentos icónicos, el viaje podría marcar el final de una era.
