Demandaba un goleador contrastado para paliar la falta de potencia ofensiva y también quería un portero fiable en el que se pudiera confiar en los momentos clave.
La campaña terminó el 25 de mayo, pero a poco más de un mes para que comience la nueva temporada contra el Arsenal, ninguna de las dos cuestiones se ha resuelto. De hecho, la situación es peor de lo esperado.
Sin movimientos en ataque
En ataque, el United ha incorporado a Matheus Cunha y se ha acercado a Bryan Mbeumo, pero Amorim sigue sin tener el perfil de delantero que pedía.
Presionó por Victor Osimhen o Viktor Gyokeres, ya que quería un número 9 con presencia, pedigrí y regularidad. No le convenció el fichaje de Liam Delap y dejó claro que no creía que subiera lo suficiente el nivel del equipo.
Internamente, también hay frustración porque no se ha movido a ningún atacante.
Marcus Rashford, Rasmus Hojlund, Jadon Sancho, Alejandro Garnacho y Antony siguen vinculados al club y ése no era el plan. Amorim esperaba al menos dos salidas para remodelar la delantera.
La intención es que se produzca al menos una salida antes de que comience la gira por Estados Unidos.
Dolor de cabeza en la portería
En la portería, la situación ha sufrido un nuevo revés.
André Onana, que ya había perdido la confianza de algunos miembros del cuerpo técnico por sus irregulares actuaciones la temporada pasada, se ha lesionado y es probable que se pierda la pretemporada.
Aunque no hay ningún problema personal entre Amorim y Onana, se entiende que el técnico se haya sentido frustrado por la incapacidad del guardameta para ejecutar con regularidad las jugadas básicas.
Quiere construir desde atrás con confianza, y eso no ha sido posible.
El United estaba abierto a recibir ofertas por Onana durante el mercado, y aunque hubo conversaciones con intermediarios, no llegó ninguna oferta concreta. El entorno de Onana hizo saber que no estaba buscando activamente un traspaso, y eso ha complicado aún más las cosas.
Lo ideal sería que Amorim le sustituyera, pero si no, el plan siempre fue traer a un portero que compitiera con Onana. Y así sigue siendo.
Las fuentes afirman que se está trabajando en un nuevo fichaje y que el que llegue deberá ser capaz de ocupar el puesto de titular de Onana.
Es posible que el checo Radek Vitek, de 21 años, juegue con el United en la pretemporada, pero nadie en el club lo ve a él, ni al actual suplente Altay Bayindir, ni al emergente Elyh Harrison, de 19 años, como un auténtico aspirante al número uno.
Se cree que recientemente se han mantenido conversaciones con los representantes de Senne Lammens, del Royal Antwerp, y de John Victor, del Botafogo, lo que indica que el club está reduciendo sus opciones. También hay otros preseleccionados, y el club quiere moverse pronto.
Amorim sabe que necesita un refuerzo en ambos extremos del campo si quiere afrontar los primeros compases de la próxima temporada con tranquilidad y claridad.
