Su reciente ascenso, tras décadas de estancamiento y decepción, ha levantado el ánimo del club de la costa sur.
El Bournemouth no sólo se ha recuperado del abismo para ocupar un puesto en la parte alta de la tabla, sino que además se ha consolidado como un conjunto de gran calidad en la Premier League, uno más que capaz de plantar cara a los conjuntos más ricos y laureados del país.
El club, apodado "los Cherries" por sus camisetas a rayas de color rojo cereza, disputa sus partidos como local en el Vitality Stadium, con capacidad para 11.300 espectadores, el estadio más pequeño de la Premier con diferencia.

No dispone de un gran estadio ni de cantidades infinitas de dinero ni de una plantilla especialmente profunda, pero ha creado un espíritu que lo ha transformado de candidato al descenso en la Premier League al principio de la temporada pasada a aspirante a Europa sólo 18 meses después.
Ha sido un giro extraordinario, digno de un club que ha superado no pocas adversidades a lo largo de su periplo desde los escalones más bajos de la pirámide futbolística inglesa.
Ascenso por las ligas
El Bournemouth fluctuó entre la tercera y la cuarta categoría del fútbol inglés durante casi 50 años, hasta que la llegada del legendario entrenador Harry Redknapp ayudó a los Cherries a ascender finalmente a la Segunda División a finales de la década de 1980.
Tras fracasar en su intento de alcanzar la máxima categoría en la campaña 1988/89, el club fue incapaz de mantener su impulso tanto dentro como fuera del campo, y acabó descendiendo a Tercera División en 1990, antes de verse obligado a declararse en suspensión de pagos 18 años más tarde.
Poco después, el Bournemouth sufrió una quita de 10 puntos y descendió a la cuarta división, al borde de la bancarrota.
Enfrentado a una nueva sanción de 17 puntos y a la clara posibilidad de descender al fútbol no profesional, el exjugador Eddie Howe asumió el cargo de entrenador interino, convirtiéndose en el técnico más joven de la Football League, con 31 años.
Howe transformó de inmediato la suerte del club, salvándose del descenso en la penúltima jornada de la campaña 2008/09, antes de llevar a los Cherries a ascender de división en dos etapas distintas en el cargo.
Con la ayuda de nuevos propietarios y una mayor estabilidad entre bastidores, el Bournemouth alcanzó nuevas cotas en 2015, cuando el club selló por primera vez el ascenso a la máxima categoría del fútbol inglés.
Desde entonces, se han mantenido más que firmes en la Premier League, terminando novenos en la temporada 2016/17 y atrayendo al club a jugadores de la talla de Nathan Ake, Jack Wilshere y Dominic Solanke.
Un periodo de dos años en la Championship entre 2020 y 2022 demostró ser poco más que un parpadeo, con el Bournemouth restableciéndose como un equipo de primera calidad de la Premier League una vez más.
Ahora, bajo la propiedad de Black Knight Football Club -una empresa dirigida por el empresario estadounidense Bill Foley-, los Cherries, de los que también es copropietario el actor de Hollywood Michael B. Jordan, parecen estar en una excelente forma de cara a un largo y exitoso periodo en la máxima división inglesa.

En pos de un sueño europeo
Andoni Iraola y su convincente equipo del Bournemouth son una de las historias de la temporada, ya que persiguen una improbable clasificación entre los seis primeros de la Premier League.
Los Cherries ocupan actualmente el 10º puesto de la liga inglesa, tras un ligero bajón de forma, a ocho puntos del Chelsea (cuarto) y a sólo seis del Newcastle (sexto).
Sin embargo, su impresionante balance de 44 puntos en 30 partidos es sólo la mitad de la historia, ya que Iraola ha desarrollado una filosofía muy eficaz y de presión alta, que le ha ayudado a conseguir victorias contra el Arsenal, el Manchester City y el Manchester United.
Los números lo corroboran: el Bournemouth es el mejor equipo de la Premier League en recuperaciones, el tercero en goles esperados (xG) y el tercero en ocasiones totales creadas, según Opta.

Sin embargo, a pesar de todo el éxito del Bournemouth esta campaña, no fue un comienzo fácil para Iraola. Tras cosechar sólo tres empates en sus nueve primeros partidos de liga al frente de los Cherries en el curso 2023/24, el español se vio sometido a una presión inmediata.
Su puesto estuvo en juego en el 10º partido de liga, en casa contra el Burnley, otro equipo en apuros.
Una remontada decisiva (2-1) otorgó a Iraola su primera victoria en la liga, y eso resultó ser el catalizador de un importante repunte en la forma, con el Bournemouth ganando 19 puntos de 24 posibles en los ocho partidos siguientes para ayudar a inspirar a un respetable 12º puesto final.
Fue la campaña más exitosa del club en la máxima categoría en términos de puntos (48), mientras que su enfoque agresivo y frontal fue elogiado por los aficionados.
El exentrenador del Rayo Vallecano logró transmitir su filosofía y sus métodos a un nuevo grupo de jugadores.
Pep Guardiola respaldó con entusiasmo el estilo del Bournemouth. "Hoy en día, el fútbol moderno es la forma de jugar del Bournemouth".

Volviendo a la campaña actual, y a pesar de haber tenido que lidiar con una larga lista de lesiones en los últimos meses, el Bournemouth ha ido de menos a más una vez más.
La sonada marcha de Solanke, su delantero talismán, amenazó con hacer descarrilar su progresión el verano pasado, pero eso no ha hecho mucho por frenar el ímpetu de los Cherries desde entonces.
Los nuevos fichajes Dean Huijsen y Evanilson han aportado calidad al once inicial, mientras que jugadores como Milos Kerkez, Ryan Christie y Justin Kluivert siguen creciendo bajo la tutela de Iraola.
Queda por ver si el Bournemouth será capaz de asegurar un billete para el fútbol europeo y mantener el núcleo de su plantilla juntos la próxima temporada, pero una cosa es segura, el club no podría estar en una posición más fuerte a medida que continúan desafiando las probabilidades y abrir nuevos caminos.
Sigue el próximo partido del Bournemouth con Flashscore.
