André Onana habría enfurecido al entrenador del Manchester United, Rúben Amorim, al exigir un nuevo contrato durante el verano. El guardameta camerunés se unirá ahora al Trabzonspor, en calidad de cedido, hasta el final de la temporada.
Según la prensa inglesa, Amorim se enfureció cuando Onana regresó a la pretemporada pidiendo una mejora salarial. La irritación del técnico se debió en parte al hecho de que el United no se clasificó para las competiciones europeas la temporada pasada, lo que provocó una reducción del 25% en los salarios de varios jugadores experimentados, incluido el propio Onana.
Ante esa reducción de sus emolumentos, el guardameta quería un nuevo contrato para compensar la pérdida, una petición que habría disgustado especialmente a Amorim, teniendo en cuenta el rendimiento irregular del equipo la temporada pasada.
