El lateral izquierdo de 18 años fue expulsado en el final de la primera parte tras cometer una falta ante el Wolverhampton.
El árbitro no verificó la acción en vídeo, algo que enfadó mucho a Mikel Arteta, entrenador del Arsenal, pese a que los londinenses terminaron ganando 1-0.
Arteta insistió en que la acción no merecía la roja porque no era peligrosa ni cortó una ocasión manifiesta de gol.
La comisión independiente que estudió el recurso decidió la anulación de la tarjeta roja y, por lo tanto, de la suspensión de tres partidos que conllevaba.
Lewis-Skelly podrá jugar con su equipo ante el Manchester City y el Leicester en la Premier League, así como en la vuelta de semifinales de la Copa de la Liga ante el Newcastle.
En la Premier League, el equipo londinense es segundo, a seis puntos del Liverpool, que tiene un partido disputado menos.