El norirlandés se ha mostrado feliz con este nuevo vínculo que refuerza su posición en el equipo red y supone una gran dosis confianza para los próximos años.
"Estoy muy orgulloso y feliz de ver cuáles serán los próximos pasos en nuestro viaje juntos", ha declarado un Bradley que ha prometido "mantener la cabeza baja y seguir trabajando duro".
Bradley se unió al Liverpool en 2019 procedente del Dungannon United. Un año después firmó su primer contrato profesional y tras su debut y disponer de pocas oportunidades en el primer equipo fue cedido en la 22/23 al Bolton Wanderers.
Regresó en la siguiente campaña ya como miembro permanente del primer equipo. Y ahora se perfila como el dueño del flanco derecho de la zaga, donde deberá sustituir al icono Alexander-Arnold, que fichará por el Real Madrid.
