Durante el Congreso Internacional de Fútbol celebrado en Marruecos, el presidente de la FRMF expresó su deseo de que uno de los tres anfitriones llegue a la final de la competición e incluso sugirió "por qué no una final entre Marruecos y España en Casablanca".
La sede de la final de la Copa del Mundo de 2030 ha sido objeto de disputa entre Marruecos y España, mientras que Portugal albergará una de las semifinales, junto con el país que no acoja el partido decisivo.
Lekjaa también destacó el hecho de que el acontecimiento reúna a dos continentes, Europa y África, y dijo que era una oportunidad "para refrescar la memoria de los jóvenes" sobre el patrimonio histórico y cultural que une a los tres países.
La organización del Mundial de 2030 en Portugal, España y Marruecos fue ratificada el 11 de diciembre de 2024 en el Congreso de la FIFA, en una competición que también pasará por Sudamérica, concretamente por Argentina, Paraguay y Uruguay, que acogerán tres partidos de la fase final como forma de celebrar el centenario de la competición, cuya primera edición tuvo lugar en Uruguay en 1930.
Portugal, que acogió la Eurocopa de 2004, organizará por primera vez la Copa del Mundo, al igual que Marruecos, que repetirá su condición de anfitrión de la Copa Africana de Naciones (CAN) a finales de 2025, iniciada en 1988, mientras que España ya fue sede de la Eurocopa en 1964 y del Mundial de 1982.