Después de derrotar a Grecia en la última jornada, en la que Escocia no estuvo acertada, los escoceses volvieron a mostrar signos similares con un flojo comienzo en Hampden Park.
Bielorrusia se mostró ordenada en la posesión del balón y dispuso de varios saques de esquina para intentar abrir brecha en el marcador, pero Pavel Zabelin desperdició la mejor ocasión al cabecear fuera.
Esto animó a los anfitriones, que abrieron el marcador a los 17 minutos. Che Adams se lució al recibir un pase de Jack Hendry en la frontal del área, se giró y remató a gol, pero fue necesaria una revisión del VAR para invalidar el fuera de juego y conceder el gol.
En lugar de encender el fuego bajo el equipo de Steve Clark, los anfitriones se replegaron en su caparazón, ya que los visitantes parecían agudos en la posesión y causaron problemas a la contra.
Al final, no pudieron igualar antes del descanso, con lo que Escocia rompió por fin una racha de 10 partidos en casa sin ir por delante en el marcador.
La segunda parte continuó de forma similar, y Escocia recibió un aviso justo después de la hora de juego, cuando Yevgeny Malashevich sorprendió a Andy Robertson para colarse en el área y rematar en el segundo palo, pero los anfitriones se salvaron gracias a la revisión del VAR, que determinó una falta sobre Scott McTominay en la jugada previa.
Parecía que se avecinaba un final cercano, pero McTominay apareció para sellar la victoria a falta de seis minutos para el final. Un centro de Robertson encontró a la estrella del Nápoles libre de marca en el área, y fue capaz de encontrar la esquina inferior para hacer el 2-0.
En los instantes finales, Gleb Kuchko recortó distancias para Bielorrus y, al menos, puso a su equipo cerca del empate tras el postrero tanto de McTominay.
La derrota deja a Bielorrusia anclada en el último puesto del grupo tras cuatro derrotas consecutivas, mientras que Escocia se coloca líder con tres puntos de ventaja. Dinamarca y Grecia se enfrentarán más tarde.
Jugador Flashscore del partido: Scott McTominay (Escocia)