"El consejo que le di a Rabiot fue que fuera a hablar con el club y pidiera perdón, no por el gesto en Rennes, sino por las palabras fuertes e incorrectas pronunciadas por quienes le rodean contra el presidente, el director deportivo y un compañero de equipo", comenzó diciendo De Zerbi.
"Sólo le di este consejo. Nunca le aconsejé cambiar de agente. Ni siquiera lo he pensado, ni siquiera es un asunto que me preocupe", añadió el técnico italiano: Él aún no ha seguido ese consejo, por eso no puedo decir nada más. Pasado mañana tenemos un partido importante. De momento, la cuestión de Rabiot no me concierne. Es sólo un asunto del club".
"Creo que si hay voluntad de dar un paso atrás con humildad, como le sugerí a Adrien, las cosas pueden resolverse. Si, por el contrario, nos dejamos llevar por el orgullo o por cualquier otra cosa, entonces no lo sé", concluyó sobre el asunto.

Tras la victoria del Marsella sobre el Paris FC, De Zerbi abrió la puerta a una reconciliación con Rabiot, a quien dijo estar "tendiendo la mano", esperando que haya "condiciones para arreglar las cosas".
"El deseo de hacer las paces debe ser compartido por todos. Hay muchas cosas que deben evaluarse a nivel humano. Pero yo soy una buena persona y Adrien también. A veces hay que dar un paso atrás con inteligencia y humildad", añadió.
Rabiot se vio envuelto en una pelea con su compañero Jonathan Rowe hace dos semanas, tras la derrota del Marsella por 1-0 en Rennes, y fue incluido en la lista de transferibles por el Marsella.
El presidente Pablo Longoria justificó su decisión hablando, en una entrevista a AFP , de "un acontecimiento de extrema gravedad y violencia, algo inédito".