El Atlético de Madrid ya tiene a su nuevo motor para el centro del campo. Uno con llegada, con gol y, especialmente, con una capacidad enorme para generar asistencias con sus centros y con sus pases interiores. Algo así como un Griezmann 2.0.
Un objetivo vital para Diego Pablo Simeone para renovar y rejuvenecer el nuevo proyecto del conjunto colchonero en aras de intentar competir con el Real Madrid y con el Barcelona. Álex Baena ya es rojiblanco.
Son 45 millones de euros fijos los que pagará el Atlético al Villarreal en varios plazos. Además, en función de objetivos individuales y colectivos, el precio final podría ascender a los 50 millones.
Asistente de lujo
"Mediocampista con gran desborde, pegada y visión de juego, a lo largo de su carrera ha jugado en todas las demarcaciones posibles del centro del campo, especialmente como extremo por banda izquierda, aunque su pie natural sea el derecho. Virtudes a las que suma una excelente capacidad de pase, que el pasado curso le llevó a convertirse en el máximo asistente de LaLiga con 14 pases de gol", ha destacado en su web el Atlético de Madrid sobre su flamante fichaje.

Morbo con el Real Madrid
Desde su agria polémica con Fede Valverde en un partido en el Bernabéu que acabó con denuncia en una comisaría, Álex Baena ha sido tachado de antimadridista por diversos sectores de aficionados. Algo que alimentó pocos meses después cuando confesó que le encantaría jugar en el Barcelona. No será en el cuadro azulgrana, pero sí en el otro gran rival de los blancos donde actuará los próximos cinco años. Morbo servido en los derbis.
