Cuando Xavi decidió marcharse por voluntad propia, meses antes de recular y luego ser destituido, había muy pocos candidatos viables que contasen con el beneplácito de la comisión deportiva de la entidad culé. Uno de ellos era el actual preparador del Sevilla, que por entonces dirigía a la UD Palmas.
Exjugador del Barcelona, criado en La Masía, en la antigua junto al mismo Xavi Hernández, cuando colgó las botas regresó a sus orígenes para formarse como entrenador en la cantera azulgrana. Su ADN azulgrana le valió para ir ascendiendo hasta alcanzar el filial, pero hasta ahí llegó. Laporta regresó a la presidencia y colocó en el Barça Atlètic al mexicano Rafael Márquez.
García Pimienta comenzó entonces su periplo en el fútbol profesional, en Segunda con Las Palmas. Lo ascendió en su segunda temporada, la primera completa, y lo mantuvo en Primera en la siguiente, aunque con un rendimiento de más a menos que le hizo renunciar al año que aún le quedaba. Ahí, tras no transformarse ese interés del Barcelona en negociaciones reales, aceptó la propuesta del Sevilla.
Y ahora tendrá la posibilidad de medirse al club de su vida, en el que ha pasado más de 30 años entre jugador y entrenador, y a jugadores que pasaron por sus manos.
En las tres ocasiones en las que se ha medido, dos al frente de los canarios y otra, el pasado octubre, ya con los hispalenses, ha cosechado tres derrotas. Con Las Palmas perdió 1-2 y 1-0, y con los andaluces, el pasado 20 de octubre, cayó con estrépito en una de las muchas manitas que los de Flick han endosado a sus rivales, 5-1.
¿Podrá a la cuarta sumar su primera victoria? Podrás seguir la respuesta en directo desde este enlace.