Mbappé esto, Vinicius lo otro... ¿y Bellingham? Con el francés anotando goles hasta sin querer y el brasileño en el foco por todo lo que le rodea (en cuestión de futuro y de su rendimiento) en los últimos meses, la figura del jugador inglés del Real Madrid ha pasado desapercibida para el gran foco de la crítica. El internacional por los 'Three Lions', que deslumbró a propios y extraños durante los primeros dos tercios del curso 2023/24, tuvo que lidiar durante el pasado curso con problemas en el hombro que ya parecen cosa del pasado.
En ese contexto, con un cambio de entrenador en el banquillo, se esperaba ver de vuelta al mejor Jude, pero lo cierto es que, habiéndose cumplido ya el 33% de la presente campaña, Xabi Alonso sigue sin dar con la tecla para extraer la mejor versión del exfutbolista del Borussia Dortmund.
Mirando el balance de resultados de los blancos, hay un denominador común: todos los pinchazos del conjunto merengue han llegado con Jude siendo titular. Con el inglés de inicio, el Madrid luce un saldo de cuatro triunfos, tres empates y dos derrotas. Sin embargo, sin Jude o con este saliendo desde el banquillo, los números son demoledores: 10 partidos, 10 victorias. ¿Casualidad o causalidad?
Sin reproches en ataque: a gol/asistencia cada 145 minutos
Lo cierto es que, a nivel numérico en lo que a intervenciones directas en goles se refiere, la temporada de Bellingham no es para nada mala. El inglés, en 14 duelos y solo 871 minutos de juego, suma ya cuatro dianas y dos asistencias, participando en un tanto del equipo blanco cada 145'.
Sus apariciones en este sentido están siendo hasta decisivas, con un tanto y una asistencia en el triunfo por 2-1 en el 'Clásico', otra diana y pase de gol en el 2-2 frente al Elche o el decisivo gol en el 1-0 a la Juventus en la Champions League. Sin embargo, estas apariciones desequilibrantes se han combinado con duelos en los que ha pasado absolutamente sin hacer ruido: Rayo, Girona, Liverpool, Getafe...
Presente en todos los tropiezos blancos
Revisando sus apariciones en la presente campaña, observamos que Bellingham no participó en los cinco primeros choques del curso del Real Madrid. Todos ellos, con más o menos dificultades, se saldaron con triunfos frente a Osasuna (1-0), Oviedo (0-3), Mallorca (2-1), Real Sociedad (1-2) y Olympique de Marsella (2-1).
En otros cinco partidos, el inglés participó partiendo desde el banquillo, con los blancos cosechando también un pleno de victorias ante Espanyol (2-0, entrando ya con ese marcador en el 89'), Levante (1-4 y entrando con ese marcador en el 71'), Kairat Almaty (0-5, entrando con 0-3 en el 80'), Villarreal (3-1, ingresando con 1-0 en el 64') y Olympiacos (3-4, saltando al campo en el 61' con 2-4).
Mientras tanto, los nueve duelos restantes del presente ejercicio tuvieron lugar con Jude como titular, logrando el cuadro blanco triunfos frente a Getafe (0-1), Juventus (1-0), Barcelona (2-1) y Valencia (4-0); empates contra Rayo (0-0), Elche (2-2) y Girona (1-1); y sendas derrotas ante Atlético de Madrid (5-2) y Liverpool (1-0).
Una presión menos efectiva y un Madrid más vertical con Jude
Profundizando en los partidos del Real Madrid este curso bajo el prisma de la estadística avanzada, vemos que esos problemas de Xabi Alonso a la hora de encajar la figura del inglés están presentes más allá de los resultados. El estilo de juego de Jude, con cierta aversión a veces a la zona media y con su adicción a cargar área, condiciona también el juego de los blancos.
En los partidos con Bellingham, esta tendencia natural del británico hace que el conjunto blanco busque una mayor cantidad de centros por partido (13 contra 10), abusando también más de los envíos en largo (36.79 contra 31.6). De igual manera, la presencia de Bellingham suele coincidir con la de Mbappé y Vinicius en el campo. Tres estrellas ofensivas que, juntas, afectan a uno de los aspectos fundamentales para Xabi: la presión.
Aunque en Girona se vio a un Madrid mejor en este aspecto que en pasados duelos, lo cierto es que los números reflejan que, con Jude, el Madrid recupera bastantes menos balones en campo contrario (28.57 contra 35.6), obligando a obtener de nuevo el balón con la jugada más avanzada y provocando a su vez que el equipo luzca registros mayores en registros como los duelos defensivos ganados (31.21 a 29.6).
Con unos datos casi idénticos en intercepciones, la presencia de J. Bellingham cargando el área no se traduce de momento en un mayor número de toques en la misma (27.57 a 30), ni tampoco en un incremento de acciones de gol, con los blancos luciendo menos xA (1.21 a 1.55) y menos xG (2.47 a 2.93) durante las titularidades de un Jude que tiene, junto a Xabi, trabajo (y, por fortuna, tiempo) para poder volver a su mejor versión.