Clasificada por primera vez para cuartos del torneo continental gracias a un gol milagroso de Riola Xhemaili en el tiempo de descuento ante Finlandia, la Nati ha desatado la euforia hasta congregar a 4.000 espectadores en un entrenamiento abierto al público el domingo.
A continuación, un susto, la sesión del martes tuvo que ser cancelada porque cinco jugadoras presentaban síntomas gripales. Pero el miércoles las 23 jugadoras dirigidas por la mítica Pia Sundhage ya se entrenaron con normalidad.
En el Stadion Wankdorf, emblemático recinto renovado completamente en 2001 y que celebra en este 2025 su centenario, las jugadoras suizas buscarán renovar el 'milagro de Berna', el mítico triunfo 3-2 de Alemania Occidental sobre la poderosa Hungría de Ferenc Puskas en la final del Mundial de 1954.
"Intentamos compartir historias, de eso se trata la vida, incluso en nuestra burbuja. Nos unen y nos dan mucha energía", señaló Sundhage este jueves en rueda de prensa, desvelando que había puesto a las jugadoras imágenes de aquella final y de la victoria 1-0 de Suiza ante España en el primer partido del Mundial masculino de Sudáfrica 2010, que acabó conquistando la Roja.
España llega tras reforzar en la primera fase la etiqueta de favorita con el que arrancó el torneo: 14 goles a favor y tres en contra, hasta nueve futbolistas diferentes han celebrado un tanto, líder en prácticamente todas las estadísticas ofensivas (posesión, disparos, pases acertados...).
El regreso de Cata Coll, la gran duda en España
El equipo lo ha liderado Alexia Putellas. La doble Balón de Oro (2021 y 2022) ha recuperado todo su brillo, anotó tres goles y dio cuatro asistencias, y fue escoltada por Esther González y las cuatro dianas que la sitúan como mejor artillera del torneo. La delantera del Gotham FC de Nueva York se ejercitó en solitario por problemas musculares dos días pero ya se reincorporó al trabajo colectivo.
Tras haber marcado en los tres partidos apunta a titular, como la portera Cata Coll, recuperada completamente de su amigdalitis, que debutaría en el torneo después de dejar su plaza a Adriana Nanclares en la primera fase. "Sé que hay expectación, pero deberéis esperar, ni la jugadora lo sabe. Lo único que está claro es que el equipo competirá", es lo único que dijo al respecto la seleccionadora, Montse Tomé.
La Roja parte como gran favorita ante un equipo al que le tiene tomada la medida. En el Mundial 2023, en su camino al título, ganó 5-1 a Suiza en octavos. A continuación, en la Liga de Naciones también en 2023, otras dos goleadas, 5-0 y 7-1.
"Han pasado unos años y tenemos a todo un país detrás, jugamos en casa, lo que nos empuja más. Todo es posible en el fútbol y somos muy optimistas. Por supuesto que tenemos mucho respeto, pero nosotras también tenemos buenas jugadoras", explicó esta semana Nadine Riesen, titular en los tres partidos de la primera fase.
La mística de Pia Sundhage vs la vuelta de la mejor Aitana
Suiza se aferra a la magia de una noche de verano ante su gente y a la mística de la leyenda que se sienta en su banquillo: la sueca Sundhage, de 65 años, levantó la primera Eurocopa como jugadora en 1984 siendo la máxima goleadora.
Como entrenadora dirigió a la gran potencia Estados Unidos en la conquista de dos oros olímpicos consecutivos, en Pekín 2008 y Londres 2012. "Estoy fascinada por las jóvenes jugadoras de Suiza, tienen el cielo como límite", declaró antes del torneo sobre las talentosas Sydney Schertenleib, Iman Beney y Noemi Ivelj, las tres de 18 años, reconociendo que el torneo les llega "demasiado pronto".
Además de Alexia y Esther, España se guarda la carta de su otra Balón de Oro (2023 y 2024), Aitana Bonmatí, recuperada de la meningitis vírica que sufrió justo antes del torneo y a la que le habrá venido muy bien la semana de puesta a punto entre el triunfo ante Italia (3-1) y los cuartos en Berna en el mismo escenario.
"He pasado semanas duras y quiero acabar disfrutando porque hasta ahora no he podido hacerlo mucho. Espero poder aportar todo mi potencial", señaló Aitana en rueda de prensa este jueves, añadiendo que quiere "seguir haciendo historia" con la selección española tras haber ganado el Mundial y la Nations League.
Algo similar a lo expuesto por Montse Tomé, la seleccionadora de La Roja, que no quiere ni hablar de lagunas o debilidades defensivas. "¿Debilidades en defensa? Somos uno de los equipos menos goleados", afirmó en la víspera del encuentro de cuartos.