A falta de dos partidos de una decepcionante temporada en la Serie A para el octavo clasificado, una victoria en la final de la Coppa Italia contra el Bolonia en Roma sería un resquicio de esperanza para el equipo de Conceiçao, que también levantó la Supercopa de Italia en enero.
"Sin duda será un placer si podemos ganar este trofeo y satisfacer a los aficionados en un año difícil. Desde fuera, podemos parecer enfadados, pero no es el caso. Tenemos una alegría inmensa por jugar esta final", declaró Conceiçao a la prensa.
"Esta presión forma parte de la historia del Milan. Es normal en estos grandes clubes. Sólo debemos centrarnos en mañana y estar preparados".
Para Conceiçao, el Estadio Olímpico de Roma es territorio conocido, ya que pasó por el Lazio como jugador.
"Este estadio seguramente me ha dado satisfacciones como jugador, pero es el pasado. Mañana tendremos que dar lo mejor de nosotros mismos contra un equipo que pelea cada duelo como si fuera el último", afirmó.
Tras imponerse el viernes por 3-1 al Bolonia en la Serie A, Conceiçao se guardaba las cartas sobre su alineación titular.
"No lo digo, ni siquiera se lo he dicho (a los jugadores). Ellos no lo saben", dijo, añadiendo que el delantero Rafael Leão y el centrocampista Youssouf Fofana participarán tras perderse la victoria del viernes.
"Los resultados positivos mejoran el ambiente; soy consciente de que tengo un grupo sano", afirmó Conceiçao.