Contra el Lorient, el Olympique de Marsella recuperó la sonrisa y la serenidad de cara a una dura serie de encuentros contra el Real Madrid, el PSG y el Estrasburgo. El pasado viernes, Roberto De Zerbi volvió a lo básico, sobre todo en defensa, uno de los aspectos en los que más ha sufrido el equipo desde el comienzo de la temporada. El resultado fue un 4-0 y una inyección de confianza de cara al primer partido de Liga de Campeones en el Santiago Bernabéu.
Contra los 'reyes de Europa', los marselleses lo darán todo. "No vamos a Madrid a pasearnos", declaró el técnico italiano tras la contundente victoria ante el Lorient. El tono está marcado. He aquí tres claves que el OM deberá seguir si quiere cosechar un buen resultado.
Volver a la defensa de tres y no adaptarse al rival
Si hay algo que permitió a los del sur de Francia estar mucho más serenos el pasado viernes contra los bretones, fue la vuelta a una defensa de tres con el trío Pavard-Aguerd-Medina. Sí, algunos dirán que sólo fue el Lorient, pero ¿cuántas veces ha mostrado el Marsella carencias defensivas desde que llegó RDZ, incluso en su propio campo?
Los tres muchachos, que jugaban juntos por primera vez en su vida, mostraron mucha confianza, ganando muchos duelos, sobre todo en el juego aéreo. Estadística interesante: el OM ganó 22 veces en el juego aéreo, más que en todos sus partidos contra el Rennes y el París FC (6 y 6 respectivamente). Conclusión: el Marsella puede jugar más arriba con más confianza, ya que los balones largos se pueden controlar mejor.
Y, por supuesto, contar con Pavard (1,86 m), Aguerd (1,90 m) y Medina (1,84 m) ayuda. Contra el Real Madrid, De Zerbi tendrá que contar con Leo Balerdi (1,87m), el hombre que salió en la rueda de prensa del lunes, mientras que el marroquí está ausente. Con él,el Olympique recuperará a su capitán, pero no estará tan seguro dadas sus últimas actuaciones en la Ligue 1. Dependerá de él responder lo mejor posible y adaptarse a sus nuevos compañeros. En cualquier caso, el Marsella tendrá que repetir un sistema que parece funcionar mejor que la bisagra de dos laterales, sin preocuparse de las flechas de enfrente.
Aprovechar las transiciones y crear intensidad
En cuanto a la forma en que Madrid y Marsella gestionan sus emociones, ambos equipos deberían jugar de la misma manera con el balón. Es decir, con el control de la posesión, el Madrid se posicionará muy arriba, con una defensa de tres bien definida, un lateral izquierdo que se situará en la mitad izquierda rival, y delanteros y centrocampistas muy activos.
El Marsella tendrá que aguantar, agachar la cabeza y mantener la intensidad. Y cuando recupere el balón, deberá encontrar los recursos para aprovechar las transiciones y hacer daño al rival. Los balones largos pueden ser una solución, como en la situación que provocó la tarjeta roja de Huijsen el fin de semana contra la Real Sociedad. Jugadores como Greenwood, Aubameyang, Paixao y Hamed Junior Traoré también tendrán que ser letales. Habrá muchos espacios. Sólo tendrán que hallar la fórmula adecuada para atrapar al Real Madrid.
Sorprender al Real Madrid con un córner
Como todos sabemos, el Real Madrid no es un gran especialista en las jugadas a balón parado, especialmente en los saques de esquina defensivos. Es cierto que las cosas han mejorado desde la llegada de Xabi Alonso, al contrario que en la era de Carlo Ancelotti, pero el Madrid sigue titubeando en esta faceta. Muriqi les castigó en el Bernabéu en la tercera jornada al rematar de cabeza un saque de esquina del Mallorca.
El Marsella, por su parte, ha marcado tres de sus nueve goles esta temporada en saques de esquina. Aubameyang, Pavard y Ángel Gomes fueron los jugadores que aprovecharon esta situación. RDZ y sus colaboradores han trabajado este aspecto del juego, y sin duda se han dado cuenta de que se puede sacar provecho de ello. El Marsella ha demostrado que sabe hacerlo, mientras que el Madrid flojea en esa faceta, por lo que tendrá que ser inteligente y astuto a la hora de rematar los saques de esquina.