Se acabó el sueño para el Lille, que esperaba alcanzar los cuartos de final de la Liga de Campeones por primera vez en su historia, y que no empezó mal la segunda parte de la eliminatoria.
La organización táctica y técnica del Borussia Dortmund funcionó demasiado bien, lo que permitió al equipo de Niko Kovac adelantarse en la segunda parte. Emre Can y Maximilian Beier dieron a su equipo el pase a cuartos de final, que jugarán contra el Barcelona.
Gracias a David y Chevalier
El Lille se adelantó en el primer cuarto de hora. Desde el principio, los hombres de Bruno Génésio marcaron el ritmo para dominar al Borussia Dortmund.
En el minuto cinco, Jonathan David protagonizó una recuperación en el centro del campo gracias a Ismaily. El brasileño luchó duro para atacar el espacio posterior y centrar raso hacia su compañero canadiense. El nueve del Lille se las arregló entonces para colar el balón entre las piernas de un Gregor Kobel que falló por completo permitiendo el gol de los franceses.
El gol inicial era ideal para los locales, pero lo más difícil estaba por llegar. A partir del minuto 20, el Dortmund tomó el control y presionó.
El Lille empezó a sufrir, pero un hombre iba a entrar en acción: Lucas Chevalier. El guardameta realizó varias paradas majestuosas en pocos minutos ante Pascal Gross y luego ante Julian Ryerson. A la salida de un córner, el Lille resistió un poco más gracias a su portero, que salvó varias ocasiones ante Julian Brandt y Serhou Guirassy.
Tres minutos más tarde, fue Nico Schlotterbeck quien probó suerte con un cabezazo, pero Chevalier seguía atento. Benjamin André y Alexsandro intentaron responder, pero no inquietaron al conjunto alemán.
En el tiempo añadido, el Dortmund estuvo de nuevo a punto de empatar por mediación de Gross, pero su cabezazo se estrelló en el larguero de Chevalier.
El verdugo se llama Beier
Tras el descanso, el BVB siguió dominando. Maximilian Beier lanzó un gran pase al espacio a Guirassy, que aprovechó el desajuste defensivo del Lille para pasar solo y desafiar a Chevalier. El guineano fue agarrado por Thomas Meunier y cayó al suelo. El árbitro Sandro Scharer no dudó un instante y señaló el punto de penalti. Fue Emre Can quien decidió dar un paso adelante y transformar la ofrenda.
Los hombres de Kovac volvieron así lógicamente a la igualdad al filo de la hora de juego. Haraldsson probó suerte, pero Kobel se rehizo con una buena parada.
Sin embargo, el club del Ruhr volvió a la acción. La defensa del Lille parecía completamente desbordada. Karim Adeyemi vio cómo su disparo golpeaba el poste de Chevalier. Parecía que el castigo no estaba lejos... Y se materializó dos minutos más tarde, cuando Beier encontró la escuadra derecha al final de otro ataque muy vertical.
Ahora en desventaja, el Lille tenía que parar la hemorragia si quería seguir creyendo en la clasificación. Y a partir del minuto 70, los Dogos lo consiguieron, llevando más el balón campo contrario. Por primera vez en la segunda parte, el equipo de Génésio se acercó a la portería de Kobel gracias a la aceleración de Meunier y a los centros de Haraldsson, pero David no pudo batir al guardameta suizo.
Tres minutos más tarde, el Lille profundizó en la defensa del Dortmund, pero estaba muy falto de ideas y los jugadores de Kovac sólo tuvieron que cerrar filas para ver cómo se alejaba el peligro.
Otra secuencia interesante, pero el suplente Chuba Akpom no puso suficiente potencia en su cabezazo para batir a Kobel. Los cambios del Lille sirvieron de algo, pero no marcaron del todo la diferencia. Mientras tanto, los aficionados del Pierre-Mauroy siguieron alzando la voz para ayudar a sus jugadores a empatar.
No fue suficiente y el LOSC Lille no pudo encontrar el gol del empate a pesar de toda la voluntad del mundo. El Dortmund está en cuartos de final de la Liga de Campeones.
Jugador Flashscore del partido: Emre Can (Borussia Dortmund).