Una maldición ha perseguido al Girona a lo largo de su primera participación en la Liga de Campeones: juegan casi siempre bien, pero al final suelen cosechar resultados negativos. Llegan a la portería rival, generan ocasiones y lo único que cosechan son decepciones.
No fue diferente en la visita catalana a San Siro para medirse al AC Milan. Aunque los italianos metieron presión en el arranque, Mike Maignan tuvo que salvar varias veces a su equipo de ponerse por detrás. La más clara del primer acto la tuvo Donny van de Beek, que obligó al meta galo a esforzarse al máximo.
Sin embargo, como si de un bucle infinito se tratara, poco después de la oportunidad del neerlandés, en el 37', los rossoneri robaron un balón peligrosísimo en plena salida y Rafael Leao lo capitalizó superando a Gazzaniga tras sentar a su marca con dos recortes de supercrack.
1-0 favorable a los locales y nuevo jarro de agua fría sobre los chicos de Míchel. Las caras de los jugadores gerundenses se tornaron confusas, sabedores de que volvían a repetir una situación tristemente conocida. Cada vez que cometían un fallo se miraban con desazón, intensificada ahora por verse matemáticamente fuera de la tan anhelada Champions.
La vida en pocos centímetros
Sumido en un cúmulo de despropósitos, el plantel español entró en el segundo tiempo con la consigna de remontar o despedirse de la competición. En pocos minutos lograron encajonar a los hombres de Sérgio Conceição y gozar de alguna aproximación de peligro.
En uno de esos acercamientos, Bryan Gil recibió el esférico en el costado derecho del área del Milan y, tras orientarse hacia su pierna buena, soltó un zurdazo impecable que se coló por la escuadra de la meta defendida por Maignan. Pero, otra vez, la mala fortuna apareció y quiso que el habilidoso extremo de L'Hospitalet estuviera en fuera de juego por la punta de la bota. El 1-1 no subió al luminoso.
La vida se le iba al Girona en pocos centímetros y Míchel reaccionó con un cuádruple cambio en el 72' (dio entrada a Stuani, Iván Martín, Danjuma y Asprilla). Sólo quedaba la épica, pero los italianos comenzaron a perder tiempo y llevaron el duelo a su terreno para colarse virtualmente entre los ocho primeros de la fase de liga. La derrota confirmó el adiós rojiblanco al máximo escenario continental.
Jugador Flashscore del Partido: Rafael Leao.