Xeneizes y Millonarios transitaron una campaña para el olvido: estuvieron lejos de celebrar en la Copa Libertadores, fueron eliminados precozmente en el Mundial de Clubes y carecieron de alegrías en el torneo Apertura y la Copa Argentina.
Ambos encaran la penúltima jornada de la fase regular del Clausura como una oportunidad para tratar de llegar a las instancias decisivas y, de paso, complicar al eterno adversario.
Liderado por el centrocampista Leandro Paredes y con el delantero Edinson Cavani en duda por lesión, Boca defenderá su feudo (20h30 CET) un poco más aliviado, con su pase a los playoffs casi garantizado al encabezar el Grupo A con 23 puntos.
River, con la presencia de varios campeones del mundo argentinos (Franco Armani, Marcos Acuña y Gonzalo Montiel), suma 21 unidades y es sexto en la zona B.

Aunque su clasificación a los ocho primeros no parece correr peligro, sí genera preocupación su rendimiento en declive, con apenas una victoria en los últimos seis partidos del Clausura.
"Que se vayan todos"
La serie de tropiezos llegó a su pináculo en la fecha pasada, cuando el club de la banda roja cayó en 0-1 ante Gimnasia, un revés que detonó el enojo de sus hinchas: "Que se vayan todos, que no quede ni uno solo", gritaron en el Monumental.
"No estamos ajenos a la realidad", aceptó Marcelo Gallardo. Los objetivos en 2025 "no fueron como hubiésemos querido", dijo el miércoles al anunciar la extensión de su contrato hasta finales de 2026.
El Muñeco sumó 14 títulos en su primer ciclo en el Millonario, pero en su regreso, desde agosto de 2024, solo acumuló frustraciones.
Pero el técnico sabe que el superclásico, saldado a favor de River en cuatro de los seis últimos cruces, es una gran oportunidad para renacer: "Es un partido bueno para volver a ser".
El duelo más esperado del balompié argentino se presenta, además, como una pugna vital para garantizar un cupo en la Libertadores 2026, uno de los objetivos máximos de Boca Juniors y River Plate cada temporada.
La Libertadores, en el punto de mira
Para asegurarse uno de los tres billetes disponibles, los colosos de Buenos Aires tienen dos opciones: ganar el Clausura o quedar en las primeras posiciones de la tabla anual.
El Boca, segundo con 56 puntos, y River, tercero con 52, luchan por el segundo escalón. El primero se lo aseguró Rosario Central, que abrirá la penúltima jornada ante San Lorenzo. Quien ocupe la tercera casilla deberá jugar una repesca.
El historial entre xeneizes y millonarios es ligeramente favorable para los auriazules, que ganaron 92 de 264 encuentros oficiales, contra 88 para los de la banda roja.
