"Soy partidario de cuatro cuartos de 10 minutos", dijo Silver el miércoles en el programa The Dan Patrick Show, aunque reconoció que esa modificación necesitaría mucho más estudio.
"No estoy seguro de que muchos otros lo sean", admitió. "Es un cambio tan drástico para el juego... Creo que algo así tendría que hablarse más con el tiempo", indicó.
Y añadió Adam que no es algo que la liga esté considerando activamente: "No estamos a ese nivel".
La NBA ha jugado partidos de 48 minutos a lo largo de su historia, pero los partidos olímpicos y otros partidos internacionales duran 40', mientras que los partidos universitarios masculinos de EE. UU. se juegan en dos periodos de 20'.
Si la liga decidiera hacer el cambio, probablemente haría imposible batir algunos récords.
"Dado que este juego es tan global, una de las cosas que nos gustaría ver con el tiempo es la creación de un conjunto más coherente de reglas en todo el mundo en torno al juego", dijo A. Silver.
"Dejando a un lado lo que significaría para los récords y cosas así, creo que un formato de dos horas para un partido es más coherente para los hábitos televisivos modernos", expresó.
Esta medida también podría reducir el desgaste de los jugadores a lo largo de la extensa temporada de la NBA, sin tener que sacrificar partidos.
Al entrenador de los New York Knicks, Tom Thibodeau, preguntado por esos comentarios antes del partido de su equipo contra los Denver Nuggets del miércoles, no le gustó la idea.
"Soy más un tipo tradicional, así que odiaría ver eso... sólo por todos los récords y cosas de esa naturaleza", dijo.
"Creo que lo que los aficionados disfrutan es una gran competición", añadió el técnico. "Creo que si nos centramos en el aspecto de la competición, todo lo demás caerá en su lugar", señaló.