Centro de estadísticas del Real Madrid-París Basketball
Está la Euroliga como para dejarse más victorias por el camino. Ni siquiera las cuatro consecutivas que habían encadenado los de Scariolo sirvió para diferenciarse de los demás. Al contrario, el tropiezo en Milán de la jornada anterior volvió a recordarles lo durísima que es esta competición. Así que ante el París, que venía de perder cinco encuentros seguidos, no se podía fallar. Casi se hace.
Lo arregló el Madrid en el último cuarto, al que llegó después de haber ido perdiendo de ocho en el tercero. Mas hizo los deberes a tiempo y a los parisinos se les hizo muy cuesta arriba la recta final en el Movistar Arena.

Y eso que no empezó mal el partido, sabiendo lo que había en juego. Pero hasta el mejor escribano puede hacer un borrón y un 0-9 complicó las cosas. Reaccionaron los blancos para llevarse el primer acto por 24-21. Algo que cambió en el segundo, donde después de jugar durante un rato al columpio -ahora tú arriba, ahora yo abajo- volvieron a bajar el pistón. El París apretó y abrió un hueco de siete (41-48) que se quedó en casi nada al descanso (49-50).
Lejos de hacer los deberes que su entrenador seguro que les mandó en los vestuarios, los madridistas se vieron pronto con un marcador que hacía temblar los cimientos del pabellón (53-61). Tiró de orgullo y acierto unos instantes para ponerse a solo un punto, pero a los 10 últimos minutos entraron 70-74. Tocaba, pues, seguir remando. Y entonces sí lo hicieron, mejorando en defensa y manteniendo su nivel en la ofensiva con un excepcional Maledon para sellar el triunfo y sumar la 10ª victoria en 17 partidos, lo que les hace dormir en el top6 a la espera del grueso de la jornada este viernes.
Los MVP
Maledon, con 21 puntos, cinco rebotes y 27 de valoración fue el mejor de los blancos. Tavares, 16 puntos, seis rebotes y 22 créditos; y Lyles, 14 puntos, seis rebotes y seis asistencias, le secundaron de manera brillante. En el París, Rhoden fue el más entonado con 19 puntos y 26 de valoración.
