Mónaco ha dejado dos imagenes para los pilotos españoles en la Fórmula 1: de un lado, Carlos Sainz jr logró puntuar con Williams. Fue importante para su escudería y le ayudó a su compañero, Alex Albon, a meterse entre los diez primeros de la clasificación, logrando buenas posiciones. Del otro, Fernando Alonso, una vez más, tuvo que retirarse por problemas técnicos de su monoplaza, una situación que se ha ido repitiendo en los últimos Grandes Premios.
Aston Martin se encuentra a años luz de su mejor versión. Nada más hace dos temporadas, la escudería británica ilusionó a los seguidores del automovilismo español con poles, buen rendimiento y un Fernando Alonso intratable. La realidad de Aston Martin es preocupante: la llegada de Newey no le ha brindado al equipo las soluciones esperadas y las estrategias durante las carreras tan poco han sido efectivas.
"Todos estamos trabajando en el coche del 2026, pero un poco sin ninguna referencia de otro coche, solo lo que vemos del nuestro. Entonces, hay que confiar en nuestra gente, en nuestras instalaciones, en nuestros técnicos, en Newey, y eso quizás sea la mayor seguridad que tenemos. No tenemos nada fiable, pero sí que tenemos al mejor haciendo el coche. Entonces eso tiene que ayudar sí o sí", dijo Alonso a 'Mundo Deportivo'.